En relación a la decisión ¿Creer en la religión? esta es una opinión de Alain de Botton

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Esta es la opinión del experto

La religión con sus rituales y conceptos da respuesta a las grandes necesidades del ser humano: crea comunidad y proporciona herramientas para gestionar el sufrimiento y el dolor.

Este autor ateo que, a pesar de creer que el secularismo no es malo, afirma que en muchas ocasiones se ha secularizado mal, y en ese proceso se ha renunciado a algunas de las partes más útiles e interesantes de las diferentes fes.

 

Para él las religiones merecen nuestra atención.

 

Éstas han cambiado el mundo de una forma como pocas instituciones seculares lo han hecho. Consiguen combinar teorías sobre ética y metafísica con una integración práctica en educación, moda, política, viajes, hospederías, ceremonias de iniciación, edición, arte y arquitectura que no se puede comparar con los mayores y más influyentes movimientos seculares e individuales de la historia, tanto a nivel de difusión como por el impacto de sus ideas.

 

De esta forma, apunta que en un mundo lleno de fundamentalistas tanto creyentes como seculares, tiene que ser posible encontrar un equilibrio entre el rechazo a la fe religiosa y una reverencia selectiva a algunos rituales y conceptos religiosos.

 

Cuando dejamos de creer que las religiones nos fueron transmitidas de lo alto o que son completamente idiotas se vuelven más interesantes. Entonces podemos reconocer que las inventamos para que dieran respuesta a dos necesidades fundamentales que aún existen en el presente y que la sociedad secular no consiguió resolver eficazmente:

  • La necesidad de vivir harmónicamente juntos en comunidades, a pesar de nuestros impulsos egoístas y violentos que están profundamente enraizados.
  • La necesidad de manejar los aterradores niveles de dolor originados en nuestra vulnerabilidad al fracaso profesional, a las relaciones complicadas, a la muerte de seres queridos y a nuestra propia decadencia y muerte.

 

Dios puede estar muerto, pero las cuestiones urgentes que nos llevaron a que lo inventáramos continúan ahí y exigen soluciones que se mantengan válidas incluso cuando intentemos comprender algunas imprecisiones científicas en la leyenda de la multiplicación de los panes y los peces.

 

El error del ateísmo moderno fue ignorar que muchos aspectos de la fe se mantienen relevantes incluso después de que fueran rechazados sus principales dogmas. Cuando ya no sentimos que tenemos que asumir acríticamente las religiones o de denegrirlas, somos libres para descubrirlas como repositorio de una miríada de conceptos ingeniosos con los que podemos intentar mitigar algunos de los males más persistentes y negligenciados de la vida secular.

 

Fuente: De Botton, Alain. Religião para ateus. Alfragide: Dom Quixote, 2012.

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