En relación a la decisión ¿Hacer un voluntariado en mi tiempo libre? esta es una opinión de José Luis Segovia Bernabé

No
Imagen de José Luis Segovia Bernabé

Esta es mi opinión de experto

Segovia critica la pérdida del rol social propio del Estado. El actual modelo neoliberal tendría injerencia en la cuestión, disolviendo el concepto de militancia política al de militancia social o voluntariado. Éste respondería a poderes económicos y políticos, generando una ciudadanía manipulable.

El sacerdote y penalista José Luis Segovia Bernabé parte de la crítica a la Ley del Voluntariado (Ley 6/1996 de 15 de enero) ya que ha generado una pérdida del Estado respecto a su rol social, pasando de ser un “Estado social y democrático de Derecho”, a ser un mero “Estado de Derecho”. Específicamente Segovia critica que la ley establezca que la responsabilidad para satisfacer los intereses generales es compartida entre Estado y sociedad, indicando que es una manipulación inaceptable. El ser responsable es tener que responder, y a quien corresponde responder y promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas, así como remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud es a los poderes públicos, no a los voluntarios y las voluntarias.
 
La ciudadanía y asociaciones tienen el derecho a participar en la política social, pero no por eso se debe eliminar, legalmente, lo "social" en la definición de Estado, tal como ocurrió en la mencionada Ley. Para Segovia, el fomento del voluntariado responde a una herramienta para generar una pacífica involución del estado de bienestar hacia uno "moderno" de corte neoliberal. La masificación del voluntariado puede cumplir una función catártica, tranquilizando las conciencias de la ciudadanía, ocupándoles en su tiempo libre, generado por la tardanza de encontrar un empleo, la jubilación anticipada, o el paro crónico. Para el experto, el boom del voluntariado, responderá al paso de la militancia política a la social, considerándola una forma "light" de solidaridad. Segovia hace la diferencia entre militancia y voluntariado, indicando que la militancia se relaciona con una causa y su correspondiente componente ideológico. Un militante lee, debate, cuestiona. No da su tiempo libre, da su vida. Un militante apuesta por unos valores y no otros, lo que implica una postura clara, donde por ejemplo, si hay pobres, es porque también hay ricos, lo que conllevará en una lucha política y de clases. Por otra parte, el interés de un voluntario no es una causa, sino una amplia gama de motivaciones. Las ideas de "hacer algo por los demás", u "ocupar el tiempo libre", serán reflejo de ese voluntariado más "light". El voluntario no posee mayores cuestionamientos ideológicos, éticos o religiosos, y deja de lado las cosmovisiones y planteamientos críticos, lo suyo es sólo ayudar. Así, el voluntariado es fácil de manejar, Es acrítico, prefiere la solidaridad indolora que no le suponga un cuestionamiento de su vida, de su trabajo y de su economía.
 
Con todo, Segovia se preguntará si en el voluntariado realmente hay procesos de emancipación y liberación para devolver la voz y dignidad a las personas excluidas, o bien, se empeñarán en ser voz de los sin voz, condenándolos a una mudez perpetua.

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Comentarios
Imagen de Richard Benjamins
Martes, 29 de Mayo de 2012 a las 14:48

Para entender este punto de vista, me tendré que sentar y leerla bien y con atención.

Imagen de María Mercedes Álvarez Martín
Miércoles, 20 de Marzo de 2013 a las 12:53

Yo soy voluntaria de una ONG, pero me siento "militante", tal y como lo define el profesor Segovia. La ONG no solo no suple al Estado y su obligación social, sino que lo debe espolear, al denunciar las situaciones que no atiende y que hace en sentido contrario. Leáse la Campaña contra la Deuda Externa, contra la Fabricación de Bombas de Racimo, contra las farmaceúticas... El voluntario colabora y da "su tiempo", para unos será "libre", y para otros "el único que tiene". Debe ser siempre crítico, con su actitud y con su propia organización, para mejorar y no caer en vicios, no ser autocomplaciente. Cada cual lo lleva al campo social, ético, religioso..., pero si és auténtico tratará de que cale en su vida, de ir adecuando el corazón y la cabeza, y ser coherente consigo mismo.
Este es mi camino de voluntariado, con altibajos. Voy caminando con un grupo de personas a las que le suecede algo similar.

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