Ante las diversas situaciones sociales y los cambios en el mercado laboral, a veces se convoca a una huelga o paro de trabajadores que implica la suspensión colectiva de la actividad laboral con el fin de reivindicar mejoras en las condiciones de trabajo o rechazo a ciertas medidas laborales. Generalmente las huelgas consisten en dejar de trabajar durante un período determinado de tiempo (suele ser un día laboral). Cuando se llama "general" es porque puede afectar no sólo al mundo de los trabajadores sino también a otros estamentos sociales (como el colectivo estudiantil o las personas jubiladas).
Las huelgas laborales es un derecho reconocido internacionalmente para las personas trabajadoras, como parte de la libertad sindical. El objetivo es reivindicar mejoras en las condiciones laborales actuales del mercado, o bien, manifestar un rechazo explícito a ciertas medidas tomadas por instancias nacionales o supranacionales respecto de este mercado laboral.
Para algunos especialistas el desarrollo de huelgas de trabajadores no contribuye al desarrollo económico del país, y de hecho, suelen tener escasa incidencia en el mercado laboral o regulación o consecución de las ventajas sociales que se buscan. Para otros expertos, es necesario que los trabajadores puedan movilizarse para mostrar sus resparos frente a las medidas laborales que, a veces, no cuentan con la perspectiva de este sector laboral aún cuando les afecta directamente.
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Temor a que los empleadores tomen represalias en caso de participar en este tipo de acciones. Si no se desea participar también puede darse una aprehensión a la respuesta de los sindicatos o del resto de trabajadores respecto de esta acción.
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Participar en una huelga puede hacer que el sector laboral sea más considerado a la hora de tomar medidas respecto del mercado de trabajo. Algunos expertos destacan que puede afectar a la economía del país.
2 opiniones argumentadas
- Xavier Juanto
- Ex dirigente sindical de UGT
- Alina Bello
- Catedratica de Etica e Investigacion Cientifica