Aceptar una herencia de un familiar cercano, supone entre otras cosas, algo que suele revertir en una mejora económica o patrimonial para nosotros. No obstante a veces nos olvidamos de que las deudas también se heredan y que al aceptar la herencia, asumimos también las que el difunto tuviera.
Opiniones argumentadas
Sé el primero en opinar.