Convivir con uno mismo no siempre es fácil. Nadie es perfecto y cuando caemos en la cuenta de nuestras imperfecciones, puede surgir rabia contra nosotros mismos, más aún si son otras personas quienes nos hacen de espejo.
Para unos, superar nuestros defectos supone aceptarlos; para otros, rechazarlos es la mejor forma de irnos perfeccionando a nosotros mismos. De un modo u otro, lo importante es definir si realmente son defectos y, entre ellos, cuáles son superables y cuáles no.
12 opiniones argumentadas
No
- Iñigo Damiani Moreno
- Área de conocimiento, situación personal o aficiones habituales...
Aceptar mis defectos es dejarme ir a una pendiente sin fin: no lucharé por ser mejor.
Creo que una cosa es aceptarme como soy (en general) y otra abandonarme a mis peores mecanismos sin importarme lo que puedan causar alrededor.
Sí
- Guillermo García Arias
- other
“El primer paso para producir un cambio en mi vida es aceptarla como es y no de otra manera. Si me peleo con una parte mía que no me gusta, difícilmente podré modificarla. Podré hacerlo, en cambio, si acepto que algo mío no es como yo quiero, aceptando que es muy real y muy mío”.
Experto