En relación a la decisión ¿Vacunarse contra la malaria? esta es una experiencia de de Jaime Gómez-Ulla
- Jaime Gómez-Ulla
- Abogado y entusiasta del mundo del automóvil
Esta es mi opinión personal
Yo estuve hace poco un mes en la India en una zona rural, dónde a pesar de que el riesgo de malaria no era muy elevado, existía. Cuando fui a consultar a mi médico sobre las vacunas que debía de ponerme, me dijo que como no era una zona de muchísimo riesgo, dejaba a mi elección tomarme la vacuna contra la malaria. Me habían advertido los efectos secundarios bastante molestos que suele tener (por ejemplo muchas molestias de estómago), por lo que en un principio decidí no tomarla, concretamente porque yo suelo ser delicado de estómago. Pero más tarde me enteré de que la mayoría de las personas que iban a viajar conmigo habían decidido tomarla, a pesar de que todos habíamos obtenido distintos consejos de nuestros médicos. Realmente luego creo que fue la decisión adecuada.
Nunca mejor dicho, más vale prevenir que curar. Aunque realmente la profilaxis que te recetan (normalmente es un medicamento llamado malarone o doxicilina) no te asegura una protección total, hay que tener en cuenta de que se trata de una enfermedad muy peligrosa. Se pasa mal durante unos días, en los casos más extremos puede conducir a la muerte, y la sufres toda tu vida (puede ser que en el futuro te vuelva a dar un brote de malaria aún sin que te vuelva a picar un mosquito). Precisamente en la misma época en la que yo viajé, me enteré de una conocida que estuvo en un país africano, y estuvo enferma de malaria muy grave. No tuvo la precaución de tomarse la medicina para prevenirla.
Aunque de todos modos, mi mejor consejo es ser precavido con los mosquitos. De poco sirve tomarse la vacuna sí no tomamos las precauciones convenientes contra estos insectos. La mejor precaución: ponerse repelente contra los mosquitos. Cuando se esconde el sol, protegerse con mangas largas si se puede. Evitar zonas especialmente húmedas como lagos o aguas estancadas.
