En relación a la decisión ¿Aceptar mi cuerpo tal cual es? esta es una opinión de Bryan E. Robinson

Sí

• Bryan E. Robinson
• Psicoterapeuta

Esta es la opinión del experto

“A veces voy conduciendo y veo a un ciclista o a alguien que va corriendo, y pienso en la buena forma en que se encuentran, para luego amplificar sus virtudes hasta convertirlas en una derrota personal”. “En lugar de alegrarme por esas personas, empiezo a analizar mis defectos y a comparar mi barriga de cincuentón con el vientre terso de una persona de veinte”. “Cuando me sorprendo en estos pensamientos me percato de que lo importante es aprender a aceptar mi cuerpo, mi edad y a mí mismo, mi yo singular”.  “Pienso que es importante estar en la mejor forma posible, pero también estoy aprendiendo a aceptar mi barriga y mis canas”. “Aprobar el color de tus ojos o esa incipiente calvicie, y demostrar gratitud por tu cuerpo físico tal como es, te ayudará a sentirte cada vez mejor contigo mismo”.

 “Sólo recibimos un cuerpo en esto que llamamos la vida. Nadie va a mirar por estos ojos, sentir con este corazón ni tocar con estas manos; nadie excepto tú”. “Tienes mucha suerte de poder vivir esta oportunidad única de tu vida en este cuerpo. Nunca habrá otra persona construida de la misma forma en que estamos construidos tú o yo”.

Bryan E. Robinson defiende que :“para empezar a aceptar tu singularidad emocional y física puedes mandarte mensajes equilibrados y positivos, y darle la vuelta a esa voz crítica interior que va repitiéndote tus defectos como un CD que llevaras conectado en el cerebro”. “Es importante reconocer los errores y las imperfecciones humanas y asumir la responsabilidad de ellos. Conocer y abordar las propias limitaciones y defectos humanos es una virtud que se puede emplear en beneficio propio. Pero para hacer una justa valoración de uno mismo, también es importante equilibrar los defectos con las virtudes”.

En definitiva, según el psicoterapeuta y profesor Emérito de la Universidad de Charlotte, (Carolina del Norte),  “debes ser más consciente de tus puntos fuertes y de los aspectos en que puedes mejorar, sin menospreciarte y tratándote con el mismo cariño y respeto que concedes a los demás”.