En relación a la decisión ¿Aumentar mi presencia en las redes sociales profesionales? esta es una opinión de Carlos Herrero Aldeguer

No

• Carlos Herrero Aldeguer
• Director de Communityme

Esta es la opinión del experto

Como en cualquier otra red social, en Linkedin tiene cabida una práctica tan habitual como poco recomendable por engañosa, que se conoce como “postureo”.  

Esta costumbre, de la que nos habla Carlos Herrero Aldeguer en su post Postureo en LinkedIn y que en Facebook, Instagram o Twitter, podemos considerar inofensiva e incluso divertida o entrañable, en las redes sociales profesionales adquiere unos tintes negativos.  Al tratarse de ámbitos profesionales, el “postureo” se convierte simple y llanamente en engaño y desnaturaliza toda la esencia de la red social. 

En el fondo, este es el problema con las redes sociales profesionales.  Nunca podremos estar del todo seguros de estar tratando con información veraz y fiable, quedando expuestos a situaciones en que, según las palabras del propio experto, somos testigos de “como compañeros de universidad y demás gente conocida exageran su formación, carácter y ciertas aptitudes o mejor dicho, mienten como bellacos en su descripción de la red social”.

Carlos Herrero, cofundador de Communityme, es muy claro en su postura: “Linkedin no me gusta. El problema en sí no lo tengo con la red social si no con las ridículas prácticas de algunos usuarios”.  Exageraciones o engaños sobre el nivel de idiomas o de formación; capacidades y habilidades de las que carecemos pero que no nos importa destacar con tal de resaltar entre los demás o experiencias profesionales que nos permitimos exagerar para llamar la atención de los reclutadores.

Algunos ejemplos tomados del post del experto: “mi formación se limita a un cursillo formativo de reparación de tostadoras, pero voy a poner que soy Toaster Technical Assistant, que suena mejor”, “poseo un perfil en Tuenti,  Facebook, Twitter e Instagram, así que me veo con todo el derecho del mundo a autoproclamarme Community Manager, aunque no sepa ni lo que es”, o “me he pasado mi vida estudiantil maldiciendo las asignaturas más densas, los exámenes sorpresa y los trabajos de grupo, pero ahora soy una persona con gran capacidad de trabajo, dinámica y orientada al trabajo en equipo”. 

Estos y otros ejemplos, basados en hechos reales, son los que precisamente predisponen al experto contra el uso de las redes sociales profesionales como herramienta para el reclutamiento de empresas.

Concluye su post el experto con el siguiente comentario, sobre el que deberíamos de reflexionar antes de aventurarnos a participar en las redes sociales profesionales: “en general podemos exagerar, ocultar, mentir o disimular lo que somos pero tarde o temprano sale a la luz. Yo creo que lo mejor es intentar no engañar a nadie, ser uno mismo pero por supuesto destacar nuestras virtudes y demostrar lo que sabemos hacer, tampoco vamos a tirarnos piedras sobre nuestro tejado. Todo lo demás, nos guste o no, es postureo en LinkedIn.”