En relación a la decisión ¿Apuntarme a movimientos sociales para incidir en la vida política? esta es una opinión de Joan Subirats Humet
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Joan Subirats Humet
- Catedrático en Ciencia Política
Esta es la opinión del experto
Subirats afirma que el desarrollo de la ciudadanía necesita de espacios en los que se pueda desarrollar el debate.
En el marco del congreso "Edificar la Paz en el siglo XXI" desarrollado en Barcelona en abril de 2012, señaló en su ponencia que "si queremos una democracia viva, si queremos una política compartida, necesitamos espacios y oportunidades que permitan debates abiertos, donde se construyan ideales y visiones también compartidos. Espacios en los que todos y cada uno puedan intervenir. Esas son las bases para poder hablar de ciudadanía, de inclusión social, de una nueva relación con la naturaleza".
"En el escenario político, las instituciones y los partidos no han estado hasta ahora a la altura de las transformaciones en las formas de vida y de relación social. Las expectativas de participación de la gente son ahora mayores, porque pueden ser más directas e inmediatas, y lo viven y experimentan cuando usan las redes sociales. Cada uno es más capaz de crear, de organizarse, de establecer sus propios espacios, incluso de construir su propio trabajo o de buscar financiación para sus ideas usando la red. Y en cambio, las instituciones, los partidos, siguen respondiendo a pautas más propias del industrialismo de los siglos XIX y XX".
"A mayor formación de la gente, a más medios de conexión social disponibles, menos se aceptará que a la ciudadanía sólo le quepa la función política de votar, de influir o presionar a los encargados de tomar las decisiones por nosotros (los 'policy makers'). Habrá, y ya hay, más interés en poder ser “los que deciden cada día” (los 'everyday makers')".
"Seguramente, la función de los partidos seguirá siendo importante, pero lo que parece indudable es que no pueden seguir actuando como lo hacen. El reto vuelve a ser el saber formar parte de los movimientos y espacios de actividad y de renovación de la política, sin pretender representarlos ni capitalizarlos de manera sistemática. Desde el intento de compartir dudas y experiencias y no de representar en exclusiva".
"Lo cierto es que la democracia sigue siendo el campo de batalla en el que dilucidar el futuro colectivo. Pero, una vez más, no sólo en las instituciones políticas y en el debate partidista. También en la casa, también en la ciudad, también en el trabajo, también en la actividad económica y de sustento".
Fuente: "Otra sociedad ¿Otra política?"
Després de Lucreci, de Sade, de Nietzsche, de Freud/Lacan i de Cioran, els assassins i enterramorts de Déu (i, ooncs, de les monarquies, també--, la idea del Bé cristià/catòlic/luterà (el marquès ja va afirmar que la vida de Jesús era una novel"la vular) és morta i enterrada --ja era hora!--, i estem abocats a l'apocalipsi: l'únic que val és, tristament, el <<campi-qui-pugui>>. El Poder, sempre corrupte, així ho ha entès (sense haver llegit, a més, cap dels filòsofs/escriptors esmentats!). Ací, a Hispània, talment com s'esdevé a Grècia (països subdesenvolupats industrialment per causa de perllongades dictadures), la corrupció no pot ésser sinó política, com és. Aleshores, o la ciutadania reclama una societat científica, o no hi haurà, mai, participació democràtica --neodemocràtica, de destape, potser sí, però res més. Mercès.