En relación a la decisión ¿Regalar a los niños juguetes que promuevan la violencia? esta es una opinión de Maite Vallet Regi

No

• Maite Vallet Regi
• Educación

Esta es la opinión del experto

“No queremos que nuestro hijo disfrute jugando a matar. No queremos que resuelva sus conflictos liquidando a las personas con las que tiene conflictos” (Vallet, 1999, p. 45). Así de clara es la posición de Maite Vallet sobre los juguetes bélicos. Para ella, las sociedades en general intentan avanzar hacia sistemas democráticos, basados en los derechos de las personas y en el respeto de la vida; es decir, hacia el abandono de la violencia como forma de resolver los conflictos. Si es así, no tiene sentido dejar que los niños aprendan el criterio de la violencia con sus juguetes.
 
Explica en su libro que en su escuela de padres algunos de ellos le restan importancia a este hecho diciendo que con los juguetes violentos los niños descargan energía y se relajan, a lo que ella responde enérgicamente diciendo que los niños se pueden relajar y descargar energía en el parque, corriendo, saltando, moviéndose y no necesariamente jugando a matar.
 
Es cierto que cuando juegan a matar saben que es un juego, que no matan de verdad, pero es un juego que les hace disfrutar. “Juegan porque disfrutan”, afirma. Ante esto Vallet sostiene que cuando los padres se niegan a comprar juguetes bélicos a los niños el mensaje que les transmiten es “no quiero que disfrutes jugando a matar” y recomienda explicarlo con esa claridad, añadiendo que lo correcto es resolver los conflictos a través del diálogo y sin violencia.
 
La experta explica en su texto que a veces, por más que los padres se nieguen a comprar juguetes bélicos a sus hijos, otras personas lo hacen (abuelos, tíos, etc.) por tanto, igualmente acaban accediendo a ellos. Anta esta situación la pedagoga afirma que el mensaje sigue siendo el mismo y los niños saben percibirlo: mis padres no quieren que yo resuelva mis problemas con violencia, y eso, de un modo u otro y ante la insistencia, se les va grabando, lo van incorporando.
 
Vallet sostiene que los niños que no han visto películas, ni tienen juguetes bélicos son capaces de disfrutar sin agredir a nadie.