En relación a la decisión ¿Pensar que puedo hacer muchas cosas a la vez? esta es una opinión de María Konnikova

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Esta es mi opinión de experto

Konnikova dice que cada vez que obligamos a nuestra mente a hacer varias cosas a la vez (atender al correo y trabajar, seguir varios informativos...) estamos limitando la percepción de un aspecto concreto y esto impide que abordemos nada de manera comprometida, consciente y productiva.

Nuestra mente tiene una gran tendencia a dispersarse, a que la imaginación vuele a distintos lugares a salte de una cosa a otra muy rápidamente.

Konnikova escribe: "Ahora sabemos que nuestra cerebro no está pensado para ejercer la multitarea... Cuando tenemos que hacer varias cosas a la vez, no solo obtenemos peores resultados en cualquiera de ellas sino que la memoria empeora y nuestro bienestar general sufre un golpe importante".

La multitarea es por tanto un mito que nos aleja de la productividad y la eficiencia intelectual. La moda actual de la multitarea choca contra nuestra naturaleza hasta el punto de provocar gran frustración.

"Cada nuevo estímulo, cada nuevo reto que prestamos a nuestra atención es como un "depredador potencial" que le dice a la mente: "¡Oh! Quizás deberías prestarle atención a esto otro..."

La mente puede perderse en más y más estímulos hasta el infinito. Al final, lo que sucede es que prestamos atención a todo y a nada a la vez. A pesar de la afición del cerebro por divagar, para lo que no está preparado es para cambiar de actividad y menos a la velocidad de vértido que se exige hoy en día.

María Konnikova comenta que la atención es un recurso limitado y que centrarse en algo necesariamente obliga a apartar el foco de lo demás. Es imposible estar plenamente en dos cosas a la vez: "Una de ellas nos atrapa y el resto se vuelve un ruido de fondo. A veces sucede algo peor y es que absolutamente todo pasa a ser ruido".

 

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