En relación a la decisión ¿Reinventarme para adaptarme a un mundo que cambia? esta es una opinión de Mario Alonso Puig

Sí

• Mario Alonso Puig
• Médico, cirujano y conferenciante

Esta es la opinión del experto

El experto afirma que los momentos de cambio son una excelente oportunidad para convertirse en la persona que uno siempre quiso ser. Tener que reinventarse es algo muy positivo para una mente acomodada que de pronto se ve obligada a exprimir su máximo potencial, dar lo mejor y superar los desafíos con todas las habilidades a nuestra disposición.
 
Reinventarse cuando se siente genuina necesidad puede suponer una liberación personal, un cambio de vida que construya un futuro prometedor por medio del poder de la imaginación.
 
Para Puig el futuro no es lo que adviene, sino algo a lo que se puede salir al encuentro y modificarse con el poder de la imaginación. En el momento en el que uno se lanza a una transformación profunda empiezan a “abrirse un montón de puertas”. Hay que tener fe y confianza en nosotros mismos y ‘saltar’ sin saber lo que espera al otro lado. Puig cree que en los momentos de máxima exigencia se piensa mejor, más claro y hasta es nuevo el modo de percibir las cosas.
 
Según este médico especialista en cirugía general existe una base científica que apoya la teoría de que cuando nos atrevemos a iniciar un camino desconocido, una vía alternativa algo se transforma a nivel biológico. La actividad neuronal y el mayor flujo sanguíneo en determinadas zonas del cerebro permite analizar mejor las situaciones, ser más precisos, creativos, estar alerta…
 
A Mario Alonso Puig le gusta recordar la célebre frase de Santiago Ramón y Cajal: “Los hombres que realmente lo deseen pueden convertirse en escultores de su propio cerebro”. Puig interpreta estas palabras en sentido literal, es decir: embarcarse en nuevos desafíos provoca cambios biológicos e identidades transformadas.
 
“Cada día es una oportunidad para reinventarse”. Es importante dedicar tiempo a soñar y a indagar en las opciones que tenemos para cambiar nuestra vida.
 
Puig insiste en que nuestra educación nos ha vuelto demasiado racionales: “El cerebro será capaz de materializar casi cualquier cosa que el corazón le diga que tiene que hacer. Comprometerse al máximo con las elecciones que tomamos en la vida, debería ser una prioridad para destapar la energía interior.
 
Para tener una buena vida, alcanzar nuestras metas Puig propone hacerse dos cuestiones de todo corazón: la primera es “¿Qué me atrevería a acometer si supiera que no puedo fracasar?” y la segunda, “¿Cuál es el primer pequeño paso que me atrevo a dar?”. Esta es la sencilla fórmula que propone Mario Alonso Puig para cambiar nuestra vida.