En relación a la decisión ¿Pedir el divorcio para volverme a casar? esta es una opinión de Paulino Castells Cuixart

Sí

• Paulino Castells Cuixart
• Experto en temas de familia

Esta es la opinión del experto

El Dr. Paulino Castells, en su libro "Separarse civilizadamente" afirma que: "Cuando hay voluntad de reconstruir la vida en pareja, no hay que buscar los índices de desgracias en el anuario estadístico, lo que hay que buscar es la nueva media naranja. Curiosamente, entre los hombres divorciados, el 90 por ciento vuelve a casarse con mujeres solteras, mientras que en el caso de las mujeres divorciadas sólo el 60 por ciento elige hombres solteros en su segundo matrimonio."
 
"¿Y para qué volverse a complicar la vida junto a otra persona? Hay múltiples razones, de índole práctico, moral, religioso, etc., pero una muy simple y pedestre es que los seres humanos necesitamos compañía, que alguien se preocupe por nosotros cuando llegamos tarde a casa. Es muy triste estar solo o sola y no sentirse querido o querida ni contar para nadie."
 
"Claro que cuando el progenitor tiene hijos a su cargo y surge en su vida una nueva persona que reanima la llama del amor, indica una madurez el sopesar sosegadamente la situación, en vez de lanzarse a los brazos del amado. Hay padres –madres, preferentemente- que temen incorporar una nueva pareja en casa por miedo a otro fracaso y con el gran interrogante de ¿cómo lo vivirán los hijos?. También hay progenitores que tienen bien claro su particular orden de prioridades y dicen que no iniciarían una nueva relación si no fuera del agrado de los hijos, aunque aquí hay el potencial peligro de que el adulto hipoteque su futuro a las particulares decisiones e indecisiones de los hijos."
 
"En lo que respecta a los niños, estadísticamente está demostrado que el nuevo matrimonio mejora las vidas de la mayoría de los niños, en particular si son pequeños. De marchar las cosas correctamente, los niños ahora están dentro de una estructura familiar buena, con madres/padres felices y padrastros/madrastas que asumen de una manera seria su responsabilidad de ejercer funciones parentales. El niño, asimismo, está contento con su relación con el padre/madre biológico que no está proscrito o limitado por el nuevo matrimonio. Cuando los adultos no se dejan llevar por sus instintos viscerales y empujan a los niños en direcciones opuestas, o cuando son capaces de separarlos de sus batallas maritales, todo ello va en beneficio de los niños y del nuevo matrimonio."