En relación a la decisión ¿Creer que el cambio climático es una seria amenaza provocada por el hombre? esta es una opinión de Pere Estupinyà

Sí

• Pere Estupinyà
• Periodista Científico

Esta es mi opinión de experto

La pregunta sobre el origen del cambio climático no debe responderse en función de "creencias" sino de datos, y éstos demuestran en su abrumadora mayoría que la acción humana es causa directa del cambio climático que estamos viviendo.
 
Sobre si va a ser más o menos grave, existen más incertidumbres, y depende entre otras cosas de a qué ciudadano nos estamos refiriendo. El cambio climático no afectará tan negativamente a una persona de clase media viviendo en Chicago. Quizás algún evento climático más extremo, o mayores impuestos para compensar el gasto en otros territorios, pero su vida no se verá alterada. En cambio alguien viviendo en una región andina dependiendo del agua de los glaciares, o en Bangladesh donde una subida del nivel del mar puede ser catastrófica, o en zonas áridas de África donde las sequías pueden ser mucho más extremas, o si eres una especie en un ecosistema frágil o un coral caribeño afectado por la acidificación del océano, puede que lo pases muy mal.
 
La clave está en ver qué mecanismos de atenuación existen en cada rincón del planeta. Hay poblaciones más preparadas para adaptarse a las fluctuaciones derivadas del cambio climático y otras mucho menos. Además, los efectos serán desiguales, afectando más en los trópicos que en zonas tranquilas en mitad de los hemisferios.
A todo esto se le debe sumar la incertidumbre de saber si la Tierra puede tener mecanismos de atenuación. Los científicos van cambiando los pronósticos de qué será más o menos grave. Por ejemplo antes hablaban mucho de subida de temperaturas y nivel del mar, y ahora se centran más en eventos climáticos extremos, lo cual parece responder justo a estas adaptaciones a un sistema más "cargado" energéticamente.
Mi visión particular es que sí es grave y debemos afrontarlo cuanto antes, pero una visión realista me impulsa a pensar que la mitigación tiene un punto utópico y debemos trabajar en la adaptación en lugares más sensibles.