En relación a la decisión ¿Seguir fumando durante el embarazo? esta es una opinión de Heidi E. Murkoff

No

• Heidi E. Murkoff
• Escritora. Divulgadora sobre embarazo y recién nacidos

Esta es la opinión del experto

Tal y como explica Heidi Murkoff “ningún regalo que pueda adquirir una madre para la canastilla de su bebé, ningún despilfarro en juguetes, ni todo el dinero que pueda depositar en un fondo fiduciario, son comparables al regalo que puede hacer al recién nacido crecer en un ambiente sin humo”.
 
Los bebés nacidos en un ambiente con humo tienen más posibilidades de padecer el síndrome de muerte súbita del lactante, así como enfermedades respiratorias, ya sea resfriados, gripe, bronquiolitis o asma. También son más propensos a tener infecciones en el oído en el primer año de vida, a padecer disfunción pulmonar y a tener menos capacidad en los pulmones, además de un mayor riesgo de caries en la etapa de la niñez. Además de todo esto, según cuenta Hathaway, los hijos de padres fumadores tienen más probabilidades de caer enfermos y de tardar más tiempo en curarse. Asimismo, es más probable que en los tres primeros años de vida tengan que ser hospitalizados. La experta también afirma que dejar de fumar antes del parto aumenta el oxígeno disponible para el bebé durante el alumbramiento y reduce las posibilidades de un parto prematuro.
 
Se ha demostrado que cuantos más fumadores haya en casa mayores serán los efectos negativos en el bebé, puesto que la cantidad de humo que éste traga está relacionado con el número de fumadores a los que está expuesto. Y Murkoff no sólo habla de los padres que fuman en casa. Varios estudios demuestran que los niños que conviven con fumadores que sólo fuman fuera de casa siguen estando expuestos a un 70 por ciento más de partículas perjudiciales para sus pulmones que los que viven en casas donde nadie fuma. Otro de los datos preocupantes es que los hijos de padres fumadores están más predispuestos a ser fumadores cuando sean mayores.