En relación a la decisión ¿Apoyar que los vales de comida coticen a la Seguridad Social? esta es una opinión de Tomás Burgos Toledo

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Esta es la opinión del experto

La inclusión de las retribuciones en especie entre las partidas sujetas a cotización es necesaria para garantizar una cotización “objetiva, transparente y equitativa” y mantener un equilibrio financiero necesario tras la pérdida de más tres millones de cotizantes al sistema de la seguridad social.  

Desde el 1 de enero de este año, el Gobierno español ha eliminado las exenciones de cotización a la Seguridad Social de ciertos conceptos retributivos y remuneraciones en especie.  Por tanto, a partir de esa fecha, los cheques de comida, complementos de ayudas a transporte o guardería, seguros de salud o las aportaciones a planes de pensiones, hasta ahora exentos pasan a ser un concepto salarial sujeto a cotización.
Esta medida, que ha levantado un gran debate entre Gobierno, patronal y sindicatos, es a juicio de Tomas Burgos Toledo, Secretario de Estado de la Seguridad Social, una medida necesaria para garantizar una cotización “objetiva, transparente y equitativa”.  
La exención de cotización en algunos conceptos retributivos implicaba inequidades y discriminaciones entre los trabajadores y lo que este Decreto hace es “integrar en la base de cotización, sobre la que luego se calculan pensiones y prestaciones, una serie de conceptos que estaban convirtiéndose en auténticas vías de agua por las que muchas empresas y muchos sectores eludían una parte significativa de la cotización”.
En este sentido, el Secretario de Estado de Seguridad Social recuerda que la retribución no puede ser sustituida por otras retribuciones en especie - los populares “tickets de comida” -  añadiendo que las empresas no pueden hacer ingeniería retributiva, o como el mismo lo califica "una cotización a la carta", que se realiza en función al perfil del empleado y las circunstancias de la empresa.  Según Burgos, “el trabajador tiene derecho a cotizar por la globalidad de la retribución y eludir una parte distorsiona el salario y repercute en la protección social, no sólo de la pensión futura, sino de cualquier prestación.
Esta medida, tildada por algunos de oportunista es, según el Sr. Burgos,  una antigua aspiración en los debates políticos.  “Esto no es nuevo, que los salarios coticen por el salario efectivamente percibido, está en el Pacto de Toledo”, subrayando que “ahora que se inicia la recuperación económica, es el momento de que el empleo sea más transparente y esto contribuye a este objetivo”
En cuanto al incremento del coste laboral que esta medida supone para los empresarios con su consiguiente pérdida de competitividad, el Secretario General de la Seguridad Social hace un llamamiento a las empresas para que busquen otras vías de retribución flexible a los trabajadores, como la productividad y recuerda que el escenario actual de la Seguridad Social es “complicado” porque al perder el sistema más de tres millones de cotizantes, se ha entrado en un déficit  que obliga a tomar algunas medidas importantes como la que debatimos.

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