En relación a la decisión ¿Vacunarse contra la gripe? esta es una opinión de Carlos González

Sí

• Carlos González
• Pediatra

Esta es la opinión del experto

Según afirma González, las personas que deciden optar por la no vacunación son personas que están muy informadas, pero mal informadas.
 
El autor afirma que hoy en día la mayoría de los expertos en temas de salud e inmunología están de acuerdo en que las vacunas tienen contraindicaciones, en que hay niños y personas que no se deben vacunar, pero esto no es motivo para desconfiar ciegamente de las vacunaciones en general.
 
Las observaciones científicas realizadas a lo largo de la historia reciente han demostrado que la vacunación es altamente efectiva. Si un científico descubriera, a partir de estudios realizados, que tal vez cierta vacuna pudiera causar una grave enfermedad en las personas a las que se les aplica, la comunidad científica seria honesta y rápidamente se encargaría de confirmar los datos y, por supuesto, procedería a la retirada o la modificación de la vacuna en caso necesario.
 
Muchos de los que están en contra de las vacunas creen en una terrible conspiración mundial, en la que los laboratorios farmacéuticos se han puesto de acuerdo con todos los gobiernos del mundo, con todas las universidades y sociedades científicas y, por supuesto, con todos los médicos, y vacunan a la gente con el único propósito de ganar dinero. Pero lo cierto es que gracias a las vacunas podemos hablar de muchas enfermedades erradicadas o prácticamente desaparecidas: la viruela, el sarampión, la difteria, la tos ferina… por no hablar, dice el autor, de los millones de vidas salvadas gracias a las vacunaciones preventivas.
 
Todas estas enfermedades prácticamente erradicadas, afirma González, podrían volverse a reproducir si se produce una no vacunación masiva.
 
Actualmente estas enfermedades prácticamente no existen porque la mayoría de la población está inmunizada contra ellas. Así, las personas que deciden no vacunar a sus hijos, defienden que éstos no se enferman a pesar de no tener la vacuna puesta. En efecto, esto es así, pero sólo porque estos niños están dentro de un entorno sano y de una sociedad grupalmente inmunizada, si no se dan casos de estas enfermedades cerca de este niño o niña no vacunado o vacunada, por supuesto no enfermará.
 
El peligro, comenta el autor, es que se produzca una no vacunación sistemática. Si esto es así, en los próximos años veremos resurgir enfermedades muy peligrosas por las que en la actualidad ya no nos tenemos que preocupar.