Existen personas que actualmente todavía manifiestan rechazo, aprehensión o temor ante personas de piel oscura, utilizando ciertos imaginarios sociales negativos. Para algunos expertos esto puede generar a la larga una discriminación social de ciertos colectivos de algunas comunidades.
En algunas sociedades todavía el color de la piel puede ser un factor de discrminación, aunque no de forma explícita, sí de forma implícita, asociando rasgos positivos o negativos a ciertas personas con rasgos físicos concretos.
Para algunos expertos, este tipo de prejuicios puede terminar generando acciones de discriminación o rechazo a personas con ciertos rasgos físicos en sociedades donde prima la diversidad cultural. Para otros expertos este tipo de discriminación ya casi no se evidencia aunque sí pueda existir un racismo más de corte cultural o de clase. Por otra parte, otras voces expertas enfatizan que este rechazo es comprensible ya que, lamentablemente, en algunos sectores sociales más marginados se concentra población con ciertos rasgos físicos, debido a las desigualdades sociales que pueden prevalecer en algunas sociedades.
-
Por considerar que es un acto discriminatorio y racista, algunas personas esconden la aprehensión o desagrado que puedan tener ante la presencia con personas de rasgos físicos diferentes.
-
Generar un terreno fértil para la discriminación social de personas con rasgos físicos diferentes, además, de no facilitar la difusión de igualdad de oportunidades para toda las personas residentes en un territorio.