A veces las lentes de contacto nos molestan, porque tenemos los ojos irritados o por conjuntivitis alérgica. Sobre todo en primavera y verano cuando prolifera el polen en el aire. Sin embargo por razones estéticas o de comodidad no nos ponemos las gafas, empeorando el estado de los ojos. La duda es si esto suponer un problema más allá de la molestia y qué riesgos hay. Las alergias veraniegas provocan, en algunas personas, un efecto fuerte sobre los ojos. Producen irritación y lagrimeo intenso, por lo cual el uso de lentes de contacto o lentillas puede ser particularmente molesto. La duda es si usarlas o no.
Francisco Gómez-Ulla de Irazazabal 