En relación a la decisión ¿Enseñar a los niños a cuestionar lo que no entienden? esta es una experiencia de de Beatriz G-Jordana Moya
- Beatriz G-Jordana Moya
- Periodista, madre de 4 hijos la pequeña de los cuales tiene S. Down
Esta es mi opinión personal
Don Gregorio Marañon decía siempre: "enseñar es repetir" y si bien pareciera desierta la frase dicha sin mayor contexto, tiene en si misma un fondo a cuyo suelo se llega cuando esa repetición consigue incorporarse e integrarse en el pensamiento de un niño hasta convertirla en contenido sobre la que puedan debatir.
Esto es algo que se puede observar mas fácilmente en los niños con discapacidad intelectual que en la población normal, lo que no deja de ser interesante a la hora de aplicarlo sobre cualquier población infantil.
Hay niños con sindrome de Down capaces de leer un texto en letra de caja a los 4 años, después de haberlo escuchado junto a su madre en varias ocasiones. Ello no implica, sin más, que entiendan lo que están leyendo si el texto no va acompañado de unas imágenes (Se empleó un cuento de Walt Disney cuyo texto no superaban las tres líneas por pagina).
Si a continuación separamos el texto de las imágenes el niño es capaz de repetirlo/leerlo (por memorización), pero su significado se vuelve absolutamente abstracto; carece de significado.
Si volvemos a colocar el texto debajo de las imágenes el niño lo lee y entiende con entusiasmo pues lo aplica a lo que sus ojos están viendo; al contexto de la escena.
Esto no quiere decir que un niño con síndrome de Down lea con 4 años, sino simplemente que aplica letras a imágenes y a contextos previamente escuchadas por el adulto múltiples veces. Viene a ser un modo de memorización visual anterior al aprendizaje, que necesita ser practicado y repetido periódicamente.
Cuándo se dice entonces que un niño con síndrome de Down es capaz de leer por sí mismo?. Pues probablemente hasta los 6 años de seguir trabajando con él no será capaz de leer y entender cualquier texto acorde a su edad; es decir cuando haya integrado en su cerebro que las letras unidas forman palabras que por sí mismas tienen un significado. Hasta que el niño no sea capaz de leer en alto y alejado de su madre o su tutor, es decir exteriorizar lo aprendido, no podemos decir que sepa leer.
Ejercitar la lectura desde fases tempranas de la infancia en cualquier población es de hecho la mayor y mejor arma de defensa para un futuro niño/joven/adulto a la hora de tener criterio propio y ser capaces de cuestionar aquello que no entiendan con mas agilidad y fundamentalmente con mayor capacidad para ESCUCHAR y ENTENDER las explicaciones del adulto. Beatriz Gómez-Jordana Moya
