En relación a la decisión ¿Participar en canales de consumo colaborativo? esta es una opinión de David Brodwin

Sí

• David Brodwin
• American Sustainable Business Council

Esta es la opinión del experto

Para David Brodwin, cofundador y Consejero del American Sustainable Business Council, el consumo colaborativo es la piedra angular de la nueva economía. 
En el post "The rise of the collaborative consumption economy" publicado en el blog de US News, el Sr. Brodwin declara que el consumo colaborativo desafía la idea tradicional de que las empresas deben ser propietarias de los activos que necesitan para proporcionar bienes y servicios a los consumidores y propone nuevas formas de redistribución de la propiedad de dichos activos.
 
Algunos lo llaman “economía compartida” otros "economía persona-persona”, pero lo que para David Brodwin es innegable es que el consumo colaborativo ha desvelado el valor real, hasta ahora oculto, de nuestro bienes y productos y de las habilidades que hemos adquirido, ya que nos permite obtener monetizarlos, bien sea mediante su venta o por la cesión a otros del derecho a usarlos.
En las redes de consumo colaborativo caben transacciones tanto sobre bienes materiales como sobre atributos o habilidades humanas. 
 
Para el Consejero del American Sustainable Business Council, influyente lobby norteamericano que aboga por una economía sostenible y eficiente, muchos de los bienes materiales en manos privadas, como las casas y los automóviles, están infrautilizados.  Su valor económico podría ser determinado para generar ingresos a sus propietarios y precios más bajos para las personas que deseen usarlos.
El sistema de consumo colaborativo es también apto para el sector servicios, especialmente en aquellos que dependen del conocimiento y las habilidades profesionales.  Es el caso en el que un especialista en planificación fiscal necesita aprender francés y un profesor de francés necesita asesoramiento fiscal.
Para David Brodwin, el crecimiento imparable del consumo colaborativo se debe, sobre todo a tres factores:
Primero: la gente lo necesita.  En una economía en crisis como la actual, los jóvenes se esfuerzan en potenciar sus carreras y no pueden afrontar gastos innecesarios.  Otros grupos demográficos sufren las mismas consecuencias a raíz del redimensionamiento de las compañías y las bajadas de salarios.
Segundo: el consumo colaborativo es más eficiente.  Dispara la productividad, elimina obstáculos para el emprendimiento y permite funcionar a los mercados en situaciones en que el dinero es escaso.
Tercero:  la tecnología digital es un gran aliado del consumo colaborativo.  Internet ayuda a poner en contacto a comprandores y vendedores, promueve la confianza entre ellos y ayuda a formalizar las transacciones.
El Sr. Brodwin afirma que el consumo colaborativo es, hoy por hoy, un mercado virgen con un enorme potencial, pero existen ciertos indicios que permiten prever que su explotación ya ha comenzado y lleva un ritmo vertiginoso.  Basta con citar, como ejemplo, el sector del hospedaje en el que ya existe una fiera competencia entre varias empresas luchando por su trozo del pastel.