En relación a la decisión ¿Valorar las alternativas que me ofrece el desempleo? esta es una opinión de Pablo Rodríguez Barreiro

Sí

• Pablo Rodríguez Barreiro
• Business School

Esta es mi opinión de experto

Quien se quede en paro pueda realizar una actividad por cuenta propia como autónomo, trabajar como socio de una cooperativa, o incluso para una sociedad laboral (anónima o limitada), que puede existir previamente, o ser de nueva creación (es decir, la podría montar el propio desempleado).
El desembolso inicial para iniciar la actividad lo puede realizar mediante la capitalización de la prestación por desempleo, una medida de fomento del empleo que pretende facilitar la puesta en marcha de iniciativas de autoempleo, también conocidas como “micro emprendimientos”.
Se puede solicitar la cantidad que se justifique como necesaria para iniciar la actividad, pero con el límite del 60% del importe total de la prestación pendiente de recibir. La actividad se debe iniciar en el plazo máximo de un mes desde la resolución de la concesión del pago único, y en todo caso, con fecha posterior a la solicitud (es decir, no se puede crear la sociedad laboral, por ejemplo, y a continuación solicitar el pago único).
Esta alternativa del pago único no es lo suficientemente conocida, habría que potenciarla más para que pueda funcionar como un freno al desempleo. Cuando un trabajador por cuenta ajena se queda en paro, normalmente se dedica a buscar otro empleo sin considerar la posibilidad de ser su propio empleador, contando además con un dinero inicial.
Otra cuestión es que además del pago único, se pudiese desde el Gobierno aplicar algún tipo de bonificación o incentivo adicional a estos “micro emprendedores”, con lo cual una parte de los miles de personas que lamentablemente pierden su empleo cada mes no sólo no engrosarían la abultada cifra del paro, sino que con su esfuerzo crearían empleo.
Esta iniciativa privada exige una actitud positiva y grandes dosis de energía ya que será necesario afrontar obstáculos, desafíos, nuevas situaciones, y barreras de forma constante. Es una posibilidad cierta y latente que algunas de las personas que rodeen al micro emprendedor lo desalienten sobre sus proyectos, haciendo referencia al actual contexto recesivo y las dificultades que este conlleva para cualquier tipo de emprendimiento.
La perseverancia se convertira en un factor clave pero, además, se necesitará estar plenamente convencido de llevar a cabo el proyecto y de haber elegido el camino correcto para hacerlo.  Para lograr llevarlo a cabo nos será fundamental una fuerte autodisciplina y organización ya que habremos de desarrollar la actividad sin necesidad de un jefe.
Deberemos hacer una investigación previa sobre la viabilidad del producto, cual es su mercado (poder adquisitivo, si éste está saturado, etc.) y todas las diferentes alternativas que rodean a la actividad elegida, deberemos identificar a nuestros potenciales clientes y nuestros argumentos de ventas.
Por último, es fundamental fijar objetivos claros, a consumarse en etapas ya planificadas, dentro del corto, mediano, y largo plazo.