En relación a la decisión ¿Pensar que la "democracia digital" ayuda a la regeneración democrática? esta es una opinión de José Luis Orihuela
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José Luis Orihuela
- Profesor universitario, conferenciante y escritor
Esta es mi opinión de experto
Para Jose Luis Orihuela, Doctor en Ciencias de la información “las redes sociales no son una burbuja ni una moda pasajera, sino que forman parte, junto al mundo físico, de nuestra experiencia cotidiana de la realidad” y cuestionan los principios sobre los que se asienta la democracia “tradicional”.
D. José Luis Orihuela afirma que la información que las redes sociales proporcionan al ciudadano digital "fractura las jerarquías y el centralismo por lo que desconcentra el poder”. Orihuela, profesor y Doctor en Ciencias de la Información, lo afirma en una entrevista concedida a la revista digital www.wawancara.com.
Las infinitas posibilidades de información y participación que las redes sociales nos brindan, mejoran la situación del ciudadano frente a las instituciones sociales y aumentan sus posibilidades de participación en la vida democrática y de control sobre sus representantes. Para el Profesor Orihuela, “el problema con la clase política no es sólo que no responda preguntas en ruedas de prensa, sino que tampoco responda por sus errores de gestión”
“Todas las instituciones sociales (políticas, económicas, educativas, religiosas, familiares y mediáticas) están sufriendo el impacto de la virtualización de las relaciones sociales”, afirma José Luís Orihuela y por mucho que a los “viejos actores” les cueste aceptarlo, ese impacto tiene un reflejo en el mundo real y está redistribuyendo el poder sobre la toma de decisiones de una forma contrastable. Recuerda el Sr. Orihuela que “en España, el 15M fue un hito porque hizo visible un movimiento social que hasta entonces era puramente virtual: la gente de las redes salió a las calles.”
A la vez que todo lo anterior, se muestra prudente en cuanto a la velocidad de ese cambio hacia una nueva forma de entender y ejercer la “democracia”, cuando nos recuerda que “ya sabemos cómo son las campañas políticas 2.0, pero todavía no sabemos cómo sería una democracia 2.0” y afirma que “seguramente cualquier sistema futuro aunque mejore la transparencia, distribuya el control y aumente la frecuencia de las consultas, requerirá de administradores profesionales”.
(Opinión publicada por los editores).