En relación a la decisión ¿Pensar que la democracia digital tiene sus límites y riesgos? esta es una opinión de José Luis Orihuela

Sí

• José Luis Orihuela
• Profesor universitario, conferenciante y escritor

Esta es mi opinión de experto

Tenemos que utilizar la tecnología para transformar la cultura, la política, para participar de una forma diferente. Pero por sí sola no tiene el carácter mágico que muchas veces se le atribuye. Por ello, en primer lugar, cuando hablamos de tecnología tenemos que hablar de personas, personas que adoptando la tecnología transforman su realidad.
 
También hay que entender que esas personas están en un contexto histórico, cultural, político diferente, y que la misma tecnología utilizada por personas que viven en entornos diferentes tiene efectos distintos (siguiendo con la línea de que no se trata de un elemento mágico). La llegada de teléfonos inteligentes a una sociedad no va a convertirla automáticamente en más abierta, en más participativa, etc. Hace falta una cultura de participación, un civismo que hay que construir, y que la tecnología por sí sola tampoco lo puede conseguir.
 
Tenemos que pensar también que los beneficios de la democracia y los beneficios del desarrollo tienen que alcanzar también a los desconectados. Porque a veces estamos diseñando este tipo de estrategias pensando solamente en gente que está conectada a Internet o que dispone de un teléfono móvil inteligente (a veces más inteligente que el propio usuario). Pero hay mucha gente que no está conectada, que no solamente no dispone de energía eléctrica, sino que no dispone de agua corriente, que no tiene ni para comer. Entonces los beneficios de la democracia, los beneficios de la participación, de la libertad y del desarrollo también tienen que llegar a la gente que está desconectada.