En relación a la decisión ¿Repatriar a los enfermos de Ébola? esta es una opinión de José Ramón Repullo Labrador
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José Ramón Repullo Labrador
- Profesor de Planificación y Economía de la Salud
Esta es la opinión del experto
Para el Dr. José Ramón Repullo, la repatriación de enfermos de ébola, además del riesgo que conlleva trasladar un microroganismo como el ébola de continente, implica pocas mejoras para los pacientes y añade los gastos, inconvenientes e incomodidad que generan dichos traslados y aislamientos.
En unas recientes declaraciones realizadas a el diario El País, el Dr. José Ramón Repullo Labrador, Profesor de Planificación y Economía de la Salud de la Escuela Nacional de Sanidad, se muestra partidario de "enviar equipos de atención especializada al lugar en el que se encontraban los enfermos para ofrecerles una atención con estándares asistenciales europeos", frente a aquellos expertos que mantienen que "la opción de trasladar a España a los enfermos es razonable desde un punto de vista humanitario y que atender lo mejor posible a sus ciudadanos entra dentro de las obligaciones de un Estado."
Además de evitar el riesgo que implica importar un patógeno tan virulento, ello hubiera permitido atender a pacientes de la zona. Ademas tal y como señala el Dr. Repullo Labrador en las citadas declaraciones, “si se hubiera enviado un equipo con profesionales y medios para instalar un hospital de campaña, el coste económico hubiera sido similar, la atención a los enfermos probablemente equivalente a la recibida en España y, además, se podrían haber aprovechado estos recursos para asistir a pacientes de la zona.”
Además de los argumentos anteriores, el Dr. Repullo señala qué, frente a cuestiones éticas y humanitarias de corte más bien oportunista, la repatriación de pacientes afectados por ciertas enfermedades infecciosas genera la incertidumbre de si se podrá gestionar adecuadamente el caso. Incertidumbre ante las que las autoridades políticas y sanitarias correspondientes debían haberse planteado una serie de cuestiones que habrían evitado la situacion actual de alarma social.
En concreto señala que "había que haberse hecho las siguientes preguntas: ¿Tenemos la suficiente preparación para hacer frente a una asistencia de este tipo? ¿Hay alternativas más eficaces?”. Cuestiones a las que él mismo da respuesta en sus declaraciones: “Parece que al final las condiciones de preparación no eran las correctas”, lo que relaciona, en parte, con el cambio de modelo del hospital Carlos III y su subordinación a La Paz."
