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• Judith Vidal-Hall
• Consejera de EUROZINE

Esta es la opinión del experto

Judith Vidal-Hall es una de las editoras de los Manifiestos para el Siglo XXI (Manifestos for the Twenty-first Century, Seagull Books) y directora de la revista "Index On Censorship". Miembro del Consejo Asesor de Eurozine, la red europea de publicaciones culturales en la que participan más de 80 periódicos y revistas europeas, además de un buen número de periodistas y profesionales de la comunicación e información, junto con asociaciones de esos sectores y que además publica la revista Eurozine en la que recopila los artículos de mayor interés publicados por sus asociados y traducidos a todas las lenguas oficiales de la Union Europea, la Sra Vidal-Hall es además una reconocida activista a favor de la libre expresión y de los derechos de la persona contra las intromisiones de la tecnología en las esferas de la vida privada.

La Sra Vidal-Hall, lideró una demanda colectiva incoada en 2013 por un grupo de internautas británicos contra Google por presuntamente haber controlado las búsquedas a través de ese navegador y haberles enviado publicidad personalizada entre la primavera de 2011 y el verano de 2012.  Para los demandantes esto supone un atentado contra su privacidad y una intromisión en su intimidad.

Para esta activista británica con su conducta Google infringió la legislación comunitaria que exige el consentimiento del usuario antes de “instalar” cookies (herramientas empleadas por las páginas web para recordar las preferencias de un usuario) en cualquier dispositivo.

En la demanda se señala que el control "clandestino" que ejerció Google en ese periodo causó "angustia y vergüenza entre los usuarios británicos" y pide que responda ante los tribunales del país

Entre esas quejas, los demandantes incluyen el mal uso que supuestamente hace Google de la información privada y a colocación ilegal de "cookies" en los dispositivos de los usuarios, violando así la confianza que los usuarios depositaron en el buscador y transgrediendo la legislación sobre protección de datos prevista en la legislación comunitaria.

La negativa de Google a responder a dicha reclamación y los costes que supondría todo el proceso probatorio de la conducta ilícita del buscador, demuestran, en opinión, de la Asesora de la Comisión Eurozine, que el uso de cookies por parte de los grandes buscadores escapan al control de la supervisión administrativa. Es una cuestión compleja de controlar por sus aspectos técnicos y por la infinidad de empresas que lo usan y dejan el derecho a la intimidad del usuario en un terreno frágil e irregular.

Hasta alcanzar su aplicación correcta, las políticas de utilización de cookies solo son legales cuando se controle estrictamente su respeto a la intimidad del usuario y se asegure que el consentimiento previo y claro del usuario se obtiene por el que las instala.  Estos requisitos no se están cumpliendo hoy por hoy, y por ello, esta experta se manifiesta en contra de su uso generalizado e indiscriminado