En relación a la decisión ¿Reducir mi curriculum para facilitar la búsqueda de empleo? esta es una opinión de Juan Canut Guillén

Sí

• Juan Canut Guillén
• Director comercial

Esta es mi opinión de experto

Cuando las dificultades económicas aparecen y las ofertas de empleo que se ajustan a nuestro perfil y responden a nuestras expectativas económicas escasean, llega el momento de plantearnos si tanta formación, tanta cualificación y tanta experiencia no se esta convirtiendo en un lastre para nuestra reinserción en el mercado laboral. 
Puede que sea el momento de "reajustar" nuestro currículum a la realidad del mercado y que nos convenga sacrificar alguna de nuestras capacidades en detrimento de otras para agilizar nuestra búsqueda de empleo.
Quizás debamos plantearnos ocupar empleos o posiciones que en otro momento ni siquiera hubiéramos considerado. Quizás debamos buscar un mayor equilibrio entre los perfiles demandados por el mercado y el nuestro.
Es una realidad contrastable que en el mercado laboral siempre existe una mayor oferta de empleos de menor "categoría profesional" para los que se requiere una menor formación académica o experiencia profesional y que ofrecen condiciones acordes.  
Puede ser que después de un tiempo optando a puestos que se ajusten a nuestro perfil profesional, decidamos empezar a considerar postularnos como candidatos a puestos que requieran una menor formación academica o experiencia profesional que la que nosotros tenemos.  
Y puede que, transcurrido un tiempo, esta opción se convierta en una decisión impuesta por las circunstancias que nos rodean. 
Por ello, yo recomiendo reducir  o ajustar nuestro currículum.  
Adaptarlo a un perfil profesional de menor nivel que nos permita optar a empleos para los que se requiere una menor cualificación y/o se ofrecen peores condiciones laborales, pero de los que existe una mayor demanda en el mercado de trabajo.  
Puestos de trabajo para los que, a pesar de que pueda parecer contradictorio, una amplia formación y experiencia pueden jugar en nuestra contra.
Esto no quiere decir que tengamos que eliminar o descartar la totalidad de nuestra formación académica o experiencia profesional.  
Basta con reclasificar y reordenar nuestros conocimientos y habilidades en función de las diversas categorías de ofertas que estemos dispuestos a valorar, siempre subordinado a nuestras necesidades y quizás posponiendo o incluso sacrificando alguna de nuestras expectativas profesionales.
Para no perder "prestigio" profesional propongo:
-  Identificar que grados de formación académica y/o profesional son suficientes en cada categoría de oferta a la que vayamos a optar.
-  Determinar la cualificación profesional mínima que se requiera y máxima que sea proporcionada a cada categoría de oferta. 
-  Valorar la experiencia profesional. 
Y combinarlos de forma adecuada manejando varios currículos en función a las características de cada oferta que consideremos, sin necesidad de renunciar a ninguna de nuestras cualificaciones y/o habilidades profesionales, simplemente barajarlas para que juegen anuestro favor..  
Solo debemos realizar el esfuerzo de clasificar nuestras opciones de búsqueda de empleo por categorías definidas en función del perfil exigido y condiciones ofertadas, para luego diseñar y manejar varios currículums compaginando nuestra formación, cualificación y experiencia en funcion de cada una de ellas. 
Es más, siendo realistas y ante la situación actual del empleo, yo valoraría la posibilidad de optar a puestos de inferior "categoria laboral" y diseñar varios currículums que se adapten a dichos puestos por iniciativa propia y no forzados por un empeoramiento de nuestras circunstancias económicas o personales.