En relación a la decisión ¿Dar un paseo tras una jornada laboral? esta es una opinión de Ulrich Schnabel
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Ulrich Schnabel
- Físico, periodista y autor
Esta es la opinión del experto
El experto aconseja salir a pasear cuando uno se siente agotado o bajo de ánimo después de trabajar. Caminar es también una forma sencillísima y barata de pasar un rato de ocio, dice, como bien saben los ‘peregrinos modernos’.
Para recuperar el sosiego en mitad del ajetreo de la actividad diaria, a veces resulta más fácil probar con un corto paseo, que parar, y obligarse a quedarse sentado sin hacer nada en un sillón. A diferencia de salir a correr, que suele llevar implícito un programa de entrenamiento y unos objetivos marcados, pasear debería ser una actividad sin pretensiones.
“Pasear se puede hacer sin pretensiones ni ambiciones; cada cual puede marcar su propio ritmo y seguir su propio “tantán”, escribe Schnabel.
Una ventaja de caminar es que lo puede hacer cualquiera, hasta personas con muy mala condición física. El caminante regula el ritmo de zancada a su antojo y en cuanto se siente fatigado, basta con que baje el ritmo.
Pasar muchas horas sentado frente a un ordenador es malo para la espalda y la circulación. Además, el movimiento suele potenciar la creatividad de las personas:
“Por eso los que trabajan fundamentalmente con el intelecto encuentran en el paseo una fuente valiosísima de ideas e inspiraciones…”, comenta Schnabel.
