En relación a la decisión ¿Cambiarme a Apple? esta es una opinión de Yoani Sánchez

Sí

• Yoani Sánchez
• Generación Y

Esta es mi opinión de experto

Durante 18 años de mi vida trabajé con Microsoft Windows, nunca pensé cambiarme a Macintosh ni tener un ordenador con la manzanita mordida como logo. Sin embargo un día mi laptop se rompió y una amiga me prestó su MacBook Air para que trabajara por unas semanas. Confieso que la empecé a usar con muchos prejuicios y con la idea de que no iba a encontrar la mayoría de los programas que ya usaba en las criaturas de Bill Gates. Me equivoqué. Lo primero que noté fue una interfaz limpia, bien cuidada, un diseño gratificante y algunas funciones que podían realizarse de manera muy intuitiva y con unos pocos clic.
 
Cuando tuve que devolverle el Mac a mi amiga, Windows me parecía burdo, inestable y los carteles azules de que había ocurrido un error fatal y la máquina debía reiniciarse, me resultaron intolerables, casi como un atentado informático. Si antes a cada rato tenía que tomar el destornillador para arreglar algo en el interior del PC, debo decir que desde que uso Mac, mis días de "ingeniera sin diploma" se han reducido bastante. He podido hallar todos los software que necesito para mi trabajo en versión para Mac: Adobe Suite CS5, Word, Mozilla Firefox, Thunderbird... y muchos otros. He descubierto además que hay mucho software gratuito para este sistema operativo, aunque siempre creí que todo era de pago. Ahora, cada vez que utilizo el ordenador con Windows de otra persona, me siento como si hubiera viajado en la máquina del tiempo hacia atrás.
 
Si me pidieran resumir en breves palabras por qué me siento tan gratificada por haber cambiado a Mac, diría por su estabilidad, buen diseño, compatibilidad creciente con una gran cantidad de programas, durabilidad. Entre las críticas que le hago a Apple, no obstante, están son sus elevados precios y algunas incompatibilidades con periféricos de otras marcas que me parecen insufribles, especialmente en el iPhone. De este último debo decir que es un teléfono todo terreno, compañero de vida, fuerte y también muy estable. En fin, que el camino de Windows a Macintosh sólo se transita en una sola dirección. No conozco a nadie que -por voluntad propia- haya pasado de la criatura de Steve Jobs a la de Gates... más bien es un camino que siempre se hace en el otro sentido. Por algo será, ¿no?