En el mundo moderno se compite por casi todo y la manera en la que denominamos a las cosas no es una excepción. Los idiomas más importantes pelean entre sí por conquistar la hegemonía. Hay quién opina que una solución justa podría ser elaborar un lenguaje universal.
Otros piensan que estos intentos nunca pasaron de ser una utopía y consideran que es inevitable seguir funcionando por medio de traducciones que nos permita saber de lo que se está hablando.
El propietario de una lengua, si es que existe alguien pueda reclamar para sí este derecho, es a su vez dueño de conocimiento. Un auténtico mundo plural, puede que necesite un nuevo idioma que valore por igual todas las culturas.
4 opiniones argumentadas
- alex carreras
- restauradors de materials diversos en obra i nautica , patologies ...
- Jaume Aymar i Ragolta
- Doctor en Historia y Decano Fac. Filosofía URL