A muchos les parece inútil conocer el pasado. Pocos caen en cuenta del peso que la historia tiene en el presente y en el modo como construimos el futuro. Si miramos al pasado a la hora de tomar decisiones que afectan a nuestro futuro, hay que pensar qué versión de la historia leemos y si nos afecta. La historia puede ser contada de muchas formas diferentes y eso puede influirnos a la hora de entenderla y, por tanto, a la hora de reinterpretarla y construir nuestra convivencia, algo que en parte determinará nuestra visión del futuro.
Por ello es interesante buscar un conocimiento lo más imparcial posible de nuestro pasado común.
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Las versiones de la historia más conocidas, las más presentes en las escuelas o en los medios de comunicación, no son siempre las que más pueden contribuir a construir convivencia. Cada versión de la historia responde a unos intereses. No conocer lo que los motiva nos puede empujar a una comprensión parcial de los hechos históricos, de sus causas y de sus consecuencias.
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Si atendemos a versiones interesadas de la historia podemos ser presa de una idea de comunidad muy concreta que no favorezca la convivencia y tmar decisiones sobre nuestro futuro en ese sentido.
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Informarse bien, conocer las versiones de distintos bandos sobre un mismo hecho y preguntarse sobre que bases se debe construir la convivencia.
2 opiniones argumentadas
- Jordi Cussó Porredón
- Presidente de la Fundación Carta de la Paz dirigida a la ONU
- Francesc Marc Álvaro
- Periodismo