La tecnología es un mercado dinámico y creativo. Millones de personas buscan ávidamente las novedades. Esto puede provocar un consumo desenfrenado. La buena publicidad, la insatisfacción personal o el simple afán de poseer pueden conllevar unas compras compulsivas y caprichosas.
La duda es si cuestionar nuestras pautas y conductas al consumir tecnología y plantearnos nuestras necesidades reales antes de obsesionarnos por las novedades de última hora.
El mercado tecnológico mueve cantidades ingentes de dinero, pero tiene al menos tres aspectos que aconsejan cuestionar el consumo acrítico:
- Provoca también toneladas diarias de desechos no reciclables
- Su fabricación requiere minerales presentes en zonas pobres del planeta, condenadas a una explotación sin límites
- La fascinación por lo novedoso puede provocar un consumo irresponsable.
Por esos y otros motivos es importante la decisión de consumir menos tecnología.
7 opiniones argumentadas
- Nuria Oliva Fuertes
- Editora en distintas areas de conocimiento,
- Andrés Melide
- Lo importante no es llegar al destino, sino disfrutar el camino
- Juan Canut Guillén
- Consumidor Responsable