
Cada vez es más habitual el uso de robots. La robótica y sus avances permiten facilitarnos la vida y la mecánica artificial está presente en nuestras casas, trabajos, instituciones... en definitiva, en nuestro entorno.
Pero, a pesar de sustituirnos en muchas tareas, no pueden pensar igual que un ser humano. Quizás algún día puedan decidir por nosotros -en labores sencillas ya pueden hacerlo de alguna manera-, pero hoy parece complicado que tomen decisiones abstractas como podemos hacer nosotros.