La persona impulsiva pasa a la acción y expresa sus emociones sin filtro. Actúa a remolque de tendencias como la ira, el temor, el deseo... Esta manera de ser puede provocar reacciones adversas en la vida social, la pareja o la familia.
Aprender a controlar, filtrar o moderar estos impulsos, depurando nuestra tendencia impulsiva y evitando expresarnos sin pensar un momento sobre las consecuencias parece factible pero no igual de fácil para todas las personas.
2 opiniones argumentadas
Sí
- Leticia Soberón
- Doctora en comunicación social - redes
Es una parte de la madurez el saber modular los impulsos. El control se adquiere con entrenamiento, pero no es lo mismo que la represión. Lo importante es aprender la forma de sacar la irritabilidad, la rabia, etc, en situaciones que no hagan daño a las personas. VER VÍDEO
Experto
Sí
- Enrique Baca Baldomero
- Catedrático de Psiquiatría
La impulsividad es una caracterísdtica temperamental, una situación relativamente estable que nos acompaña prácticamente toda la vida. Sí podemos manejar la impulsividad mediante un mecanismo reflexivo, pero manejarla no significa que podamos disponer de ella como queramos.
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Experto