¿Establecer una justificación clara y ética al trabajo informal?

¿Establecer una justificación clara y ética al trabajo informal?

El trabajo informal se desempeña al margen de la legislación vigente en cada momento. Sus efectos dañinos sobre la economía y la estabilidad social de un país, parecen compensados por presentarse como una opción tradicionalmente aceptada y de difícil represión por las autoridades competentes. El trabajador informal no posee ningún beneficio laboral ni le es reconocida ninguna protección social, estando expuesto a la voluntad unilateral y caprichosa del empleador en cuanto a las condiciones esenciales de su relación laboral como duración, salario, jornada, vacaciones y demás.

El concepto de trabajo informal que está impulsando actualmente la Organización Internacional del Trabajo, a través del Grupo de Delhi, se refiere a aquellas personas que, de su condición de actuantes de generadores de bienes y servicios, no derivan la cobertura de la seguridad social ni emanan la posibilidad de ejercer derechos. En España, el trabajo informal tiene cifras muy altas y ya no es solo una opción de los trabajadores que sólo quieren emplearse media jornada o unos pocos meses mientras necesitan recaudar; en ocasiones se trata de tendencias de contratación que hacen que no hayan muchas más ofertas disponibles y, en ese caso, quien busca empleo y lo necesita con urgencia debe aceptar y abandonar la seguridad de un empleo con contrato "formal" indefinido. Los trabajadores informales no sólo hacen frente a la imprevisibilidad con de su empleo, sino que además se les niegan sus derechos mas básicos y se enfrentan a otros peligros, como son las variaciones de la remuneración semana a semana o períodos de trabajo bastante prolongados, seguidos de intervalos cortos o largos de desocupación. Esto hace que a este tipo de trabajador le resulte mas difícil predecir sus ingresos para pagar las cuentas y sobrevivir y mucho menos planificar el futuro o ahorrar para comprar una casa. Pero el trabajo informal también tiene sus aspectos positivos: a pesar de que existe una brecha en la satisfacción entre los trabajadores eventuales y permanentes, esta brecha es extremadamente baja. En una escala de cero a 10, la brecha de satisfacción entre los dos grupos es inferior a 0,5. Muchos trabajadores eventuales son estudiantes que gustan de la flexibilidad de un trabajo eventual para tomarlo o dejarlo de acuerdo a las exigencias de los estudios. Incluso entre los grupos de mayor edad, hay quienes prefieren el empleo informal debido a la carga de un pago mayor. Puede ser que pierda derechos pero lo compensan en dinero en efectivo extra. Los empleadores que contratan trabajadores eventuales son mayoritariamente pequeñas empresas, que son precisamente las mas numerosas y las mas reacias a contratar por los costes laborales, costes que, al no ser de aplicación a los trabajadores informales, dan a estos unas ventajas obvias frente a los "formales" que favorece la contratación de los primeros. Ante esta reducción del nivel de coste laboral medio, los empleadores están dispuestos a dar a los candidatos no calificados y sin educación una oportunidad.

Frenos habituales
Consecuencias importantes
Cómo llevarlo a cabo
  • La ausencia de regulación legal y de cobertura social caracterizan al contrato informal como un contrato precario en el que el empleado carece de derechos sociales básicos y debe asumir que su empleador se encuentra en una posición dominante, que puede llegar a ser abusiva. La falta de regulación de las condiciones básicas del puesto de trabajo provocan su imprevisibilidad, no estando concretadas condiciones fundamentales como su duración, salario, jornada laboral, vacaciones y demás. Las consecuencias legales de trabajar de forma informal, aunque desconocidas para algunos, suelen ser económicamente contundentes tanto para el empleado como para el empleador.

  • Para el empleador el ahorro en costes laborales, no suele compensar las sanciones legales previstas y ademas le impide un desarrollo economico y empresarial adecuado. Las ventajas para el empleado son que, en la mayoría de los casos, no debe someterse a una estructura jerárquica con competencias disciplinarias, es dueño de su propio tiempo y puede estructurar su jornada a su gusto y, al quedar sus rendimientos profesionales al margen de la legislación tributaria, los ingresos suelen ser superiores.

  • Al ser un contrato al margen de regulaciones legales es necesario utilizar elementos subjetivos como son nuestra necesidad economica, nuestra urgencia por encontrar un puesto de trabajo o la confianza que nos genera nuestro potencial empleador.  
    Hay ciertas notas mas objetivas como pueden ser la reputacion o prestigio que tenga nuestro potencial empleador o las experiencias que otras personas de nuestro entorno hayan tenido con estos tipos de trabajos que nos pueden ayudar a tomar esta decision.

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